Este proyecto aprovecha al máximo el espacio exterior mediante un diseño compacto y funcional, donde cada rincón se convierte en un área de disfrute. Las jardineras de acero corten aportan carácter y contraste frente al verde del césped y las paredes claras, creando un equilibrio entre lo natural y lo urbano.

La vegetación se distribuye en composiciones dinámicas, con especies mediterráneas y tropicales que aportan volumen y color durante todo el año. El pavimento en piedra natural y las zonas de descanso integradas hacen que este jardín sea ideal para momentos de relax y reuniones al aire libre, sin perder la sensación de frescura y privacidad.

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